miércoles, 30 de enero de 2013

PREVENCIÓN INTEGRAL, UNA TAREA DE TODOS

El gran desafío que enfrenta la sociedad es mantener los valores que procuran el bien común; hay que renovar los conceptos sobre prevención, ahora ya no hablamos de prevención al consumo de sustancias o prevención del uso indebido de drogas...ahora hablamos de prevención integral.


Mucho tiempo se habló de prevención como sinónimo de "evitar o impedir" el consumo de sustancias; ese concepto quedó relegado en el pasado; ahora prevención es construir, formar, acompañar a nuestros niño/as, a nuestros estudiantes...es decir, amarlos, promoverlos, orientarlos; dentro de un marco de respeto en el más amplio sentido de la palabra. Y esto no se hace en campañas publicitarias sino, en la cotidianidad y  en la convivencia diaria.

En este contexto, una de las tareas fundamentales de docentes, padres y autoridades es brindar y garantizar la seguridad integral: física y emocional en sus respectivos ámbitos; es decir que los niños, niñas y adolescentes no sientan miedo hacia sus padres, profesores y autoridades; con la finalidad de que tengan un convivencia armónica. Para conseguir este propósito se requiere que a estos actores sociales les agrade su quehacer, es decir, sean felices y disfruten de su trabajo, de la docencia,  de ser administradores o jefes; pero  sobre todo, de la paternidad y maternidad, una de las tareas más hermosas que un ser humano pueda ejercer. 

Lo peor que le puede pasar a una persona es que le obliguen a hacer algo que no le agrada, que no le guste. En este sentido debemos preguntar: a cuántas personas no les gusta desempeñar los roles mencionados? y sin embargo  realizan esas tareas que les genera infelicidad e insatisfacción; causando graves e irreparables daños a sus hijos, estudiantes y compañeros de trabajo. Enamorarse de su profesión, actividad o quehacer, es un gran aporte a la felicidad no sólo de sí mismo, sino de quienes le rodean y, quien es feliz, dificilmente llegará a usos problemáticos de alcohol y otras drogas.

El amor es reconocer al otro como un legítimo ser humano junto a uno, nos indica el famoso científico Chileno Humberto Maturana. Hay que reconocer al niño/a, al joven, al adulto, al estudiante, al profesor/a, al vecino/a, madre, padre, etc., como a un ser humano y no descalificarlo por ser diferente a su manera de pensar, de vestir, de expresarse o por su condición económica, social o física; ese es el verdadero amor. Hagamos de nuestros hogares, instituciones educativas, lugares de trabajo y comunidades; espacios de realización personal, de bienestar y felicidad. Esta es la mejor contribución que podemos hacer a la prevención integral y, sobre todo, está a nuestro alcance en el día a día.

La felicidad es la ausencia del miedo.

Uno de los aspectos que deben tenerse en consideración en los procesos de prevención integral, es que las sustancias: alcohol y otras drogas, no vienen hacia nosotros,  somos las personas quienes que vamos hacia ellas; las causas son muy diversas, dependen de muchos factores, entre los más comunes tenemos:
  • Inseguridad
  • Carencia afectiva en el hogar
  • presión del grupo de amigos
  • Uso indebido del tiempo libre
  • Deterioro de la red de relaciones comunicacionales
Estos son, a grandes rasgos, una buena parte de los contenidos del trabajo preventivo, que como vemos no se centra en las sustancias y sus efectos; sino en los sujetos, las personas, las familias; en definitiva, en el ser humano y sus necesidades.

Ningún niño que tenga miedo a sus padres, es feliz.
Una mujer que tenga miedo a su marido, no es feliz.
Un hombre que tenga miedo a su mujer, no es feliz.
Un estudiante que tenga miedo a sus profesores, no es feliz.
Un trabajador que tenga miedo a su jefe, no es feliz.

Ninguna persona que tenga miedo, es feliz.

Las personas que se encuentran inmersas en consumo de alcohol, tabaco y otras drogas, no son felices; por lo tanto, entender la felicidad y la orientación para vivirla es una de las tareas fundamentales de los padres, docentes y autoridades involucradas en el tema.

En consecuencia con esto, enseñemos a nuestros hijos a ser felices, para lo cual tenemos todas las maravillas que nos da la naturaleza: miremos y admiremos nuestra flora y fauna...contemplemos las flores, plantas y animales...reflexionemos sobre nosotros, nuestra estructura, nuestra actitud, nuestras capacidades de sentir, pensar, expresar, amar, etc. 

Sin lugar a dudas, una de las maravillas más hermosas de la naturaleza, somos nosotros.









martes, 15 de enero de 2013

REFLEXIONES PARA...

Los sujetos tenemos la capacidad de pensar, recordar, sentir y sobre todo de reflexionar sobre nuestros actos, en esta oportunidad vamos a poner a disposición de ustedes algunos pensamientos ilustrados para  realizar reflexiones que nos ayuden a esclarecer aspectos que no están lo suficientemente claros en nuestra mente; esperemos que sea de utilidad nuestro aporte.

Aprendamos a mirar.

No todo lo que existe es visible a nuestros sentidos, especialmente a nuestra vista, aprendamos a mirar lo que nuestros ojos no ven, pero que nuestro ser siente y percibe.

En muchas ocasiones esos sentimientos y percepciones nos anuncian situaciones que conocemos como pre-sentimientos, a los cuales no les prestamos atención y, que en muchos casos suceden.

Recordemos que más es lo que desconocemos de nuestro cerebro, que lo que conocemos.


Las cosas y las personas son como son, no como nosotros queremos que sean.

Una de las cosas que impiden el crecimiento de las personas es no respetar las singularidades que tenemos los seres humanos y pretender querer influenciar y hasta en algunos casos pretender obligar a responder, actuar, decir o hacer cosas tal cual nosotros pensamos o queremos que se hagan a nuestra manera.

Los seres humanos no somos iguales, somos diferentes y hay que respetar esas diferencias.

este pensamiento nos orienta en este sentido, revisemos su contenido con detenimiento para evitar ejercer coacción a nuestros hijos, estudiantes o personas que conviven con nosotros en nuestra comunidad.

Los docentes y las puertas

Muchas personas les atribuyen a los docentes propiedades sobrenaturales en el sentido que consideran que ellos pueden generar cambios en los estudiantes, sin pa participación y anuencia de ellos; cosa que

resulta a todas luces imposible debido a que nadie aprende por otra persona, cada quien tiene que vivir su propio proceso de aprendizaje.

El aprendizaje y la educación, no es un aspecto reservado para los estudiantes y los jóvenes; todos los seres humanos estamos aprendiendo permanentemente y uno de esos seres que jamás termina de aprender, aquel que es el eterno estudiante; ese es el docente, el profesor.

Por eso, con mucha razón se dice que el profesor es el único artista que nunca verá terminada su obra, debido a que el sujeto jamás termina de aprender.

El padre y el hijo.

Muchos padres son dados a aconsejar a sus hijos reiterando de manera por demás insistente sobre la manera como caminan en la vida...mira por donde andas, mira con quien andas, ten cuidado con quien caminas, etc.

Pero, así mismo, descuidan un importante detalle que es el ejemplo, que equivale a las huellas que dejan y que sus hijos las siguen; por eso nos pareció muy apropiado este mensaje en el que el hijo le dice a su padre:

Ten cuidado tú, recuerda que yo sigo tus pasos.

El mensaje esta tan claro que no admite más comentarios.

Raíces y Alas.

Uno de los legados más firmes que tenemos los padres es el de promover a nuestros hijos, quererlos, amarlos y educarlos.

En esa tarea cometemos muchos errores, especialmente cuando queremos que sean una extensión de nuestra persona y no le permitimos que se desarrolle acorde a sus propias capacidades, intereses y vocación.

Las alas que tiene todos los seres humanos, incluyendo a nuestros hijos, les permitirán volar de acuerdo a sus necesidades, hacia donde ellos consideren que deben hacerlo; la tarea que como padres o maestros nos queda, es solamente orientar y acompañarles en ese vuelo.

De la misma manera, las raíces les permitirán permanecer siempre tener los pies sobre la tierra, y no perder la noción de que a pesar de tener visiones muy elevadas, somos habitantes de la madre tierra y no podemos vivir en una nube de cualquier color que se nos ocurra pintarla. Ese es el mejor regalo que le podemos dar a nuestros hijos durante el proceso de formación y acompañamiento.

Deseos de aprender.

Docentes, por sobre todas las limitaciones que puedan tener durante el desarrollo de su incomprendida tarea, consideren siempre el deseo supremo que significa el deseo de aprender.

Nada, absolutamente nada es más poderoso en un niño que el deseo de aprender. consideramos que es un deber de cada docente impulsar ese deseo, materializarlo y, cuando consideremos que no existe o no tengamos desarrollada la capacidad para detectarlo; busquemos con paciencia y veremos que ese deseo existe en cada niño y en cada joven; sino lo vemos y promovemos, no podremos hablar de éxito en nuestra tarea educativa.

Esperemos que lo compartido sea de interés y utilidad para quienes tuvieron la paciencia y el interés de detenerse a compartir estos mensajes en nuestro blog.















lunes, 14 de enero de 2013

VIDEOS SOBRE SUSTANCIAS

La FAD Fundación de Ayuda Contra la Drogadicción de España, ha realizado y realiza grandes aportes a la prevención de drogas, uno de los tantos aportes consiste en la producción de excelente material audiovisual que por ser de carácter educativo, lo ponemos a vuestra disposición.

En esta ocasión se trata de una serie de videos sobre diferentes sustancias, iniciamos con la sustancia que más daño causa a los sujetos, familias y comunidades en general, cuando se lo usa o consume de manera excesiva y poco responsable.



Continuamos con lo referente a la marihuana, sustancia que genera tanta controversia en estos tiempos debido a los criterios divididos sobre los daños y los beneficios que pudiera causar a los sujetos que la usen o consuman.



Seguidamente abordaremos lo relacionado con la cocaína:


Una de las sustancias más adictivas y difíciles de dejar de consumir, a pesar de los daños que causa al organismo, es el tabaco, ya que contiene nicotina,  sustancia terriblemente adictiva.


Las drogas de síntesis merecen una especial atención en nuestros días:


Esperamos que este material sea analizado previamente, para determinar la posibilidad de compartirlo con estudiantes, para lo cual se debe considerar la posibilidad de incorporarlo en actividades como videos-foro o conversatorios con docentes responsables de orientar la actividad y de esa manera lograr que los participantes puedan plantear sus inquietudes y recibir las orientaciones necesarias para que obtengan sus propias conclusiones.

miércoles, 2 de enero de 2013

PENSAMIENTO COMPLEJO PARA UNA EDUCACIÓN INTERDISCIPLINARIA

Eduardo Domínguez Gómez

Presentación.

Responder al tema propuesto para esta intervención supone situarnos en dos perspectivas: a) la invitación de los griegos, con su paideia, a pensar en una respuesta integrada que diera cuenta de la educación en los tres aspectos constituyentes del ser humano: mente, corazón y brazos; en otras palabras, pensamiento, sentimiento y acción; b) el mundo de la investigación, avanzado en el campo de las ciencias, dispuesto a convertirse en materia de enseñanza: las disciplinas. Porque disciplina es la parte de la ciencia que se enseña.

Obsérvese que el aspecto de enseñabilidad queda por fuera con más frecuencia de la que estamos dispuestos a reconocer. Sin embargo, gran parte de la parcelación de las ciencias nació de tres convicciones operativas: una, no es posible conocer todo de todo, hay que contentarse con alguna de sus partes; otra, la ciencia no puede atender todo a la vez; lo de valores y bondades, naturaleza ontológica o apariencia estética, y los propósitos y la esencia de lo verdadero, dejémoselo a la filosofía y las humanidades; y la tercera, no es posible enseñar todo mezclado; hay que crear asignaturas que atiendan sus contenidos siguiendo métodos claros y distintos.

Transformación de la educación.

La educación, como alimento, debe prepararse cada día. Es necesario cuidar con esmero los ingredientes, atender sigilosamente su guiso y estar alertas durante la degustación. Para hacerlo bien, hay que mantener conciencia clara de que las recetas son apenas una guía de trabajo, que no resuelven nada en la situación concreta ni para siempre, que la experiencia sólo nos sirve para iluminar mejor el inevitable empezar de nuevo, porque el ser humano no es materia inerte ni moldeable.

Pero, con todo lo móvil, no domesticable y siempre cambiante del proceso de enseñanza y aprendizaje, es posible hacer reflexiones que nos sirvan de referencia en el momento de resolver problemas, ofrecer pautas o trazar políticas para la educación. Por eso no serán impertinentes los pensamientos que traten de innovar metas y procedimientos.

Educar es una acción propia de los seres vivos.

Entrados ya en el siglo XXI, cierto consenso se percibe entre los tratadistas acerca del proceso histórico de l transformación de homínidos y antropoides en seres humanos. Las emociones, los gestos y las palabras constituyeron las primeras dotaciones con que la naturaleza y el artificio (acto intencional, premeditado, para la diversión y la supervivencia) permitieron superar la sensación de vacío ante la evidencia angustiosa de la muerte. El simbolismo, la representación mental y el lenguaje son factores de articulación del sujeto individual que le permiten la construcción de su conciencia y la configuración de su inconsciente. La educación, la comunicación y la sociabilidad son los vínculos que permiten la interrelación, capaz de propiciar los intercambios mientras crea representaciones, comprensiones y comportamientos colectivos.

Desde la aparición misma de los signos y su articulación en forma de lenguaje, el ser humano tuvo que recurrir a formas de entrenamiento, buscando que sus congéneres y descendientes pudieran usarlos para comprenderse. Esto significa que el lenguaje, la comunicación y la educación constituyen la tríada que dio forma a la naturaleza humana. Y desde entonces han estado presentes los interrogantes acerca de la manera apropiada de proceder para alcanzar mejores resultados. Los primeros testimonios de ello lo encontramos en el arte rupestre, en el arte funerario y en los libros sagrados de todas las civilizaciones y culturas.

Hoy las preguntas que por educación siguen vigentes, a pesar de las millones de respuestas que durante la historia hemos elaborado. Y esta es la razón de que sigamos en la búsqueda.

Para hacernos una idea de las respuestas más comunes acerca de en qué consiste educar, empecemos por la definición de la Real Academia Española en la vigésima segunda edición:

1. Dirigir, encaminar, doctrinar. //  2. Desarrollar o perfeccionar las facultades intelectuales y morales del niño o del joven por medio de preceptos, ejercicios, ejemplos, etc. Educar la inteligencia, la voluntad. //  3. Desarrollar las fuerzas físicas por medio del ejercicio, haciéndolas más aptas para su fin. //  4. Perfeccionar, afinar los sentidos. Educar el gusto. //  5. Enseñar los buenos usos de urbanidad y cortesía.

Estas cinco acepciones dejan ver entre líneas la concepción instrumental, operativa, que hace más de medio siglo empezó a ser puesta en duda por su insuficiencia para aclarar los procesos cognitivos y los valores morales, estéticos, ciudadanos, religiosos y científicos que están implementados en la acción educadora. Y hacen poca referencia a una de sus etimologías posibles: educere, "sacar de adentro".

Hoy tenemos más claridad para decir , por una parte, que la educación consiste en un proceso de toda una vida (no sólo de la niñez y la juventud), con actividades que permiten formar criterios y valores, transformar conductas y poner en acción las representaciones mentales para intervenir el mundo circundante. Y, de otro lado, que no se trata de una donación, entrega o inyección de principios, valores, pautas y métodos de unas personas hacia otras, sino de una construcción social de valores, significados y conocimientos que se hace realidad entre personas, en espacios como el hogar, la escuela, la empresa y las organizaciones sociales. Y, finalmente que el sistema educativo (ministerio, programa, asignaturas, clases, proyectos, profesores, estudiantes, administración escolar y recursos) si tiene significado importante en la formación subjetiva y social de las personas, pero no alcanza a ser el valor definitivo en la educación y la comprensión humana. Se mezcla con todas las actividades del diario acontecer y cuando alcanza una dimensión orientadora, igual que el director de una orquesta, no sustituye a la partitura, a los instrumentos ni a los músicos para la ejecución de cada concierto.

Si la educación no se agota en la actividad académica, si no se reduce a las instituciones que la imparten o propician, si no forma a los seres humanos de una vez por todas, si alcanza a dirigir la vida sólo esporádicamente, porqué insistir en ella? La respuesta es clara: por esas mismas características. Porque la educación es una tarea que no termina ni puede presentársela acabada a ningún maestro., jefe de Estado o ciudadano. Formarse, comprender y actuar son el sino de todos los días y en todas las circunstancias. Y aunque no partimos de cero ningún día, los componentes afectivos, psicológicos, racionales, conductuales, eróticos, tanáticos, demenciales, dolientes o virtuales de nuestro espíritu desafían toda la experiencia adquirida, la sintonizan en los contextos biográficos y circunstanciales de quienes actúan, la proyectan hacia nuevas metas y, con ello, le cambian la monotonía de su propio ser. Entonces surgen las inseguridades y el anhelo de anclajes, mientras se agita la curiosidad e impulsa la voluntad hacia nuevas experiencias.

Etiologías de una renovación polémica.

Siguiéndoles los pasos a las investigaciones históricas recientes, entre elas las de Louis Not y Howard Gardner, distinguimos dos rupturas epistemológicas en la educación moderna acerca de la educación. La primera centrada en la cuestión del método: al estudiante se le da forma o se le propician las condiciones para que se forme? En este caso, Juan Jacobo Rousseau y don Simón Rodríguez - por razones históricas, geográficas y afectivas, más cercano a nosotros- fueron "padres fundadores" de la disidencia frente a la tradición. La segunda ruptura, centrada en la cuestión de los propósitos: se educa para formar habilidades y destrezas o para la comprensión? En esta disidencia de la disidencia se deja ver un gran protagonista: la revolución cognitiva.

Herencias claves para los educadores.

Nos encontramos , entonces, ante un nuevo reto: considerar los métodos ya no en función de la eficacia de la transmisión sino en razón de propiciar la comprensión. 

En su obra, la educación de la mente y el conocimiento de las disciplinas. lo que todos los estudiantes deberían comprender, Gardner (1988) identifica otras seis repercusiones de la revolución cognitiva sobre la educación:

a. El desarrollo: información, lenguaje, pensamiento y comprensión son cuatro elementos constitutivos del proceso cognitivo. Ningún ser humano carece de alguno de estos elementos, pero todos los despliegan en forma diferenciada desde la cuna. Gracias a los trabajos de G. Piaget, conocemos desarrollo desigual de la comprensión desde niños y sabemos que estos no son adultos pequeños, ni son ignorantes.

b. Representaciones mentales universales: fue Noam Chomsky el encargado de llamar la atención contra las exageraciones individuales y evolutivas cuando propuso que el lenguaje es un tipo muy peculiar de sistema cognitivo que tiene sus propias representaciones psicológicas y neurológicas.

c. Distintos patrones de inteligencia: el grupo dirigido por Gardner, al estudiar las representaciones mentales y el modo en que se concretan en los individuos y al hacer investigación experimental acerca de la representación de ciertas zonas del cerebro y la capacidad de uso de sistemas simbólicos por parte de las personas evaluadas, y a través de examen de poblaciones especiales como los genios, ha demostrado que "todos los seres humanos poseen, por lo menos, ocho formas distintas de inteligencia: linguística, lógica, matemática, musical, corporal - cinestésica, naturalista, intrapersonal (hacia nosotros mismos), interpersonal (hacia otras personas) y existencial (que nos permite plantear problemas sobre la vida, muerte y la realidad).

d. Las primeras representaciones son transformables: para ello se necesita la educación, porque pueden arraigarse para el resto de la vida las ideas erróneas que se desarrollan durante la primera infancia. Por ejemplo, que quien se parece a mí es bueno y quien no es sospechoso de maldad; que lo que se mueve tiene vida y lo quieto está muerto; que las cosas están controladas por fuerzas mágicas ocultas. Pero la educación básica no sólo puede errar en el intento de remover tales representaciones, sino que está imposibilitada para evitar que se formen otras durante el resto de la vida. Por ejemplo, la historia es una lucha constante entre buenos y malos; el poder nace del fusil; la mejor solución para el desorden público es la fuerza; el que trabaja bien no tiene que temer al desempleo, etc. Esto hace necesaria una labor permanente de educación crítica. 

e. La conveniencia de las funciones cognitivas superiores:  Ya no basta con las destrezas elementales en el pensamiento o en lo operativo: es posible (y urgente) que la educación se ocupe del "descubrimiento y la resolución de problemas, la planificación, la creatividad y la comprensión profunda" y también de las capacidades de "pensar en la propia mente, es decir, de reflexionar sobre la propia memoria (capacidad metamnemónica), el propio pensamiento (metacognitiva) e incluso las propias representaciones mentales (capacidad de metarrepresentación)".

f. Más allá de la cognición.  el papel de la personalidad, la motivación y la emoción: como el hombre no es una máquina, y es mucho más que un combinado de sistemas materiales, y como la "comprensión no se digita" (Ramiro Galeano), no es posible seguir trabajando en la educación con modalidades racionales y técnicas. Hay que abrir el espacio en los planes de estudio al fenómeno de la motivación intrínseca y las emociones, buscando la mejor combinación entre las pautas generales para los grupos de estudiantes y las que deben corresponderse con las distintas personalidades.

El vuelo hacia la Metacognición.

Se produce conocimiento para ser vendido y se lo valida por el grado de consumo que demuestre en los mercados libres (Lyotard). Paradoja: en los tiempos en que hemos aprendido la capacidad científico-técnica de resolver los problemas fundamentales de la supervivencia de la especie humana, todavía no logramos la voluntad política de erradicar los sufrimientos por hambre, y falta de techo, cariño, educación, salud o trabajo, que reducen la condición humana de media población del planeta, ni de redistribuir las riquezas, convertidas en lujos y despilfarro y concentradas en una minoría absoluta que comanda las decisiones.

Estudio, rigor, mucha comprensión, estado de alerta permanente y ejercicio crítico son los fundamentos necesarios para aprender a movernos con soltura en el nuevo dispositivo epistemológico que nos permitirá lograr el cometido: la metacognición transdisciplinaria. Dicho en palabras corrientes: reflexionar acerca de los modos en que reflexionamos, conocer nuestros modos de conocimiento, pensar nuestro pensamiento, buscando el panorama de conjunto, haciéndolo siempre desde nuestra formación disciplinar.

Por ello es necesario acoger una perspectiva intelectual que se esfuerce por entender lo sistémico y sus partes constitutivas; lo ecológico y los nichos que allí anidan; lo dialéctico, 


por aquello de los contraros en movimientos y lo dialógico, por la capacidad integradora de los contrarios, que se necesitan mientras se repelen.



miércoles, 19 de diciembre de 2012

Adicción al sexo

Dr. Enrique Echeburúa.



La importancia concedida a la sexualidad es muy variable de unas personas a otras y no está relacionada directamente con el grado de salud mental. Hay personas sanas en que la motivación sexual es muy baja y otras, en cambio, en que es muy alta. Sin embargo, la adicción al sexo, a diferencia de la sexualidad normal -más o menos alta-, se caracteriza porque el objetivo de la conducta es más la reducción de un malestar que la obtención de un placer. El sexo se convierte en un remedio para reducir la ansiedad y la actividad sexual se transforma en algo morboso y obsesivo (Mellody, 1997).

La adicción al sexo, que afecta más a hombres, consiste en un exceso desbordante de deseos y de conductas sexuales que el sujeto se siente incapaz de controlar. El impulso incontrolado se convierte en una conducta sexual breve, frecuentemente poco satisfactoria, que se repite con intervalos variables siempre cortos -entre algunas horas y escasos días-, con mujeres distintas y sin reparar en los prejuicios de toda índole que tal conducta ocasiona a uno mismo y a su familia. A veces se puede invertir hasta cuatro horas diarias, pero los pensamientos sobre el tema pueden ser casi constantes. De este modo la conducta amorosa se reduce a una mera urgencia biológica irreprimible, con el único objetivo de la penetración/eyaculación y sin dejar espacio a la comunicación, a la ternura. Se considera a las personas sólo en función del sexo, que se convierte, de esta forma, en la única vía para conseguir una gratificación personal y afectiva (Alonso-Fernández, 1996).

Se trata de un tema recurrente en el cine y en la literatura, desde Catherine Deneuve en Belle de Jour hasta la inolvidable Lulú, el personaje de Almudema Grandes que deambula por ambientes sórdidos a la búsqueda de todo tipo de experiencias con las que superar la dependencia de su amor verdadero.

Más allá de la cantidad, lo que aparece en primer plano es una conducta sexual irrefrenable que genera autogratificación y, especialmente, el alivio de un malestar interno. Se trata de conductas no deseadas -ahí está la diferencia con la promiscuidad o con el apasionamiento- y que producen consecuencias muy negativas para el sujeto: físicas (enfermedades de transmisión sexual), psicológicas (sentimientos de culpa y vergüenza, ruptura matrimonial no deseada, daño a los hijos, autoestima devaluada, soledad, etc.) y sociales (pérdida de empleo, devaluación de estatus socioeconómico, etc.). Esta vorágine de sexo sin control lleva a un abandono de las obligaciones familiares, sociales y laborales. La vida sexual se vive en secreto y con culpa. La depresión, incluso con ideas de suicidio, está muy asociada a este tipo de conductas (Earle, Earle y Osborn, 1995).

Características de la adicción al sexo

  • Conductas no deseadas
  • Interferencia en la vida diaria
  • Enfermedades de transmisión sexual
  • Sentimientos de culpa
  • Ruptura de pareja no deseada
  • Sexo como alivio de un malestar
Las mujeres afectadas sufren una doble sensación de vergüenza  en función d su rol de protección de la familia, y experimentan un deseo brutal de la autoestima (Norwood, 1986).

La adicción al sexo puede revestir diversas formas: masturbación compulsiva, búsqueda ansiosa de relaciones sucesivas con múltiples amantes, frecuentación habitual de prostíbulos, consumo abusivo de teléfonos eróticos, llamadas telefónicas obscenas o recurso irrefrenable a las páginas de internet dedicadas al sexo, en donde se intentan satisfacer fantasías sexuales de toda índole. El contenido de la adicción puede referirse a una sexualidad normal (es decir a relaciones consentidas con adultos) o a una sexualidad parafílica (por ejemplo, el exhibicionismo o la pedofilia).

Conductas implicadas en la adicción al sexo

  • Autoerotismo compulsivo
  • Búsqueda ansiosa de múltiples amantes
  • Frecuentadores habituales de prostíbulos o de teléfonos eróticos
  • Conducta hipersexual y obsesiva con una relación.
La tecnología actualmente disponible ha posibilitado la aparición de nuevas variantes. En concreto, las líneas telefónicas party-line y las eróticas constituyen para algunas personas una vía de adicción al sexo., mantenida inicialmente por reforzadores positivos -una forma de entretenimiento, de excitación- y controlada finalmente por reforzadores negativos -el alivio del malestar-. En algunos casos los sujetos pueden llegar a percibir la conducta como incontrolable y a ver limitada seriamente su vida a nivel personal, familiar, económico y social (Guerricaechevarría y Echeburúa, 1977). Estas líneas presentan unas características determinadas que facilitan la dependencia. En primer lugar, la disponibilidad ambiental de éstas es total: en todos los hogares hay un teléfono y los números de estas líneas están ampliamente difundidos. La tentación de llamar -y de poder hacerlo en un entorno discreto- es, pues, muy fuerte. En segundo lugar, la gratificación obtenida es inmediata; sin embargo, el estímulo punitivo -el gasto de la llamada- se demora hasta la recepción de la factura del teléfono. En tercer lugar, el funcionamiento intrínseco de las líneas party-line potencia la percepción de control: el que llama no tiene más que apretar un botón para cambiar de interlocutor, pudiendo variar cuantas veces lo desee y sin tener que dar la cara ante la otra persona. Y por último, la búsqueda de la persona deseada (generalmente de sexo opuesto) suscita una gran tensión emocional en el caso de las líneas party-line, y una excitación sexual, en el caso de las líneas eróticas, que pueden aliviarse con conductas masturbatorias.

El consumo abusivo de alcohol o de drogas suele estar asociado a la adicción al sexo. De hecho, la función desinhibidora del alcohol facilita la implicación en conductas sexuales que generan un grado de malestar en las personas en los momentos de lucidez.

La transición de una sexualidad alta, pero normal, a una sexualidad adictiva viene marcada fundamentalmente por dos variables: 

a) la interferencia grave en la vida cotidiana (sufrimiento y autodestrucción, soledad, pérdida de familia, incapacidad de mantener una relación afectiva duradera, etc.);

b) aparición del síndrome de abstinencia cuando no se puede llevar a cabo la conducta sexual (nerviosismo, irritabilidad, dolores de cabeza, temblores, insomnio, etc.). 


Los signos alertadores de la adicción al sexo son múltiples:

a) fantasías sexuales alejadas de la relación de pareja

b) conductas sexuales anónimas, múltiples y breves

c) sexualidad comprada (prostitutas, teléfono erótico, etc.)

d) conductas de "voyeurismo"

e) acoso sexual a personas dependientes del sujeto

f) contactos con niños

Aunque no se conoce con detalle el origen de esta adicción, algunas dimensiones de personalidad (impulsividad, autoestima deficiente, etc.), antecedentes en la infancia (abusos o traumas sexuales) o en la adolescencia (rechazos en el ámbito afectivoerótico) o diversos elementos situacionales actuales (soledad o vacío existencial, relación de pareja insatisfactoria, etc.) parecen desempeñar un papel importante.

Tomemos este aporte del Dr. Echeburúa, como un insumo que debe ser ubicado en el contexto y época en que vivimos, para reflexionar sobre este importante aspecto de la vida de los sujetos.














domingo, 9 de diciembre de 2012

ADICCIONES SIN DROGAS ?

No es pobre quien poco tiene, sino quien más desea.
Lucio Anneo Séneca.

En esta oportunidad vamos a compartir el pensamiento del Dr. Enrique Echeburúa, sobre un tema que ya no resulta tan novedoso, pero que tiene actualidad por la época en que vivimos y que son producto de más de dos décadas de investigaciones sobre el campo de adicciones.

LAS NUEVAS ADICCIONES:

Juego

Sexo

Comida

Compras

Trabajo

Internet

Todas las adicciones acaban por minar la vida de quienes las sufren y de todos los que le rodean.

En este sentido cobra cobra gran relevancia conocer los factores de vulnerabilidad, que hacen que unas personas tengan más probabilidad de ser adictos que otras.

No olvidemos que muchos llevamos a cabo conductas que pueden producir adicción, pero sólo unos pocos las van a padecer. De ahí que este sea un aspecto de gran relevancia no sólo para el tratamiento sino para la prevención e incluso para el desarrollo de medidas legislativas sobre ciertas conductas que pueden producir - o ya producen- adicción.

El siglo XXI se está caracterizando por las conductas adictivas; es un fenómeno en aumento y otras nuevas adicciones probablemente irán surgiendo en los próximos años.

Las drogas tienen una notable capacidad de aumentar los niveles de un neurotransmisor denominado dopamina. Precisamente el aumento de dopamina en el cerebro de los adictos es lo que provoca el subidón -la sensación de euforia- producido, por ejemplo, por la cocaína. Pero la dopamina puede aumentar también con un contacto sexual, un atracón de comida, el placer de comprar por comprar o el enganche de una máquina tragamonedas. Los sujetos una vez adictos a una sustancia o a una conducta, se habitúan a altas concentraciones de dopamina.

La distinción entre drogas duras y drogas blandas es irrelevante. Más que el tipo de sustancia, lo que importa en una toxicomanía es la dependencia y, en último término, la pérdida de libertad de la persona. Los componentes fundamentales de los trastornos adictivos son la pérdida de control y la dependencia.

Cualquier conducta normal placentera tiende a repetirse y es, por ello, susceptible de convertirse en un comportamiento adictivo. Pero esto sólo ocurre cuando el sujeto muestra una pérdida habitual de control al realizar una determinada conducta, continúa con ella a pesar de las consecuencias negativas, manifiesta una dependencia de la misma, no puede quitársela de la cabeza, se muestra desasosegado si no puede llevarla a cabo de inmediato y por último, pierde interés por otro tipo de actividades que antes le resultaban gratificantes.

LÍMITES ENTRE LAS CONDUCTAS NORMALES Y LAS CONDUCTAS ADICTIVAS

  • Pérdida de control
  • Fuerte dependencia psicológica
  • Pérdida de interés por otras actividades gratificantes
  • Interferencia grave en la vida cotidiana.
Las adicciones psicológicas (adicciones sin droga) no figuran incluidas como tales en el DSM-IV (American Psyquiatric Association, 1994) ni en la CIE- IV (Organización Mundial a la Salud, 1992).

Esto lo cuestiona el Dr. Echeburúa, indicando que es un error, ya que el perfil clínico de las adicciones psicológicas y el enfoque terapéutico requerido son muy similares a los del resto de las adicciones. Algunas adicciones como la ludopatía o la adicción al trabajo, están fomentadas por la sociedad actual, en la que prima el éxito y el dinero rápido. Así mismo la adición a las compras no es ajena a los valores sociales, que impulsan al consumo en una sociedad en la que se es tanto más cuando más se tiene y que no ve ningún peligro en el consumo desmesurado.

Vicio es una categoría moral; las adicciones psicológicas, sin embargo, constituyen un trastorno mental.

ADICCIONES PSICOLÓGICAS Y ADICCIONES QUÍMICAS

La experimentación del síndrome de abstinencia es el núcleo fundamental de todas las adicciones, sean estas químicas o psicológicas. Las características más comunes del síndrome de abstinencia son las siguientes:

  • Impulso en forma de deseo intenso
  • Tensión creciente hasta la ejecución de la conducta
  • Desaparición temporal de la tensión
  • Vuelta gradual del impulso asociada a estímulos internos y externos
  • Condicionamiento secundario a dichos estímulos.
a) Impulso intenso para realizar una conducta que trae consigo efectos perjudiciales para la persona que la ejecuta.

b) Tensión creciente (humor depresivo, irritabilidad, deterioro de la concentración, trastornos del sueño, etc.) hasta que la conducta es llevada a cabo.

c) Desaparición temporal de la tensión.

d) Vuelta gradual del impulso con fuerza creciente, que está asociada a la presencia de estímulos internos (disforia, tensión emocional, aburrimiento, recuerdos del placer experimentado en ocasiones anteriores, etc.) y externos (olor a alimentos en el caso de un adicto a la comida o la visión de una mujer a solas en el caso de un sexoadicto).

e) Condicionamiento secundario a dichos estímulos internos y externos.

Las adiciones psicológicas, no son tan comunes como las adicciones químicas.

Con respecto al síndrome de abstinencia, en ambos tipos de adicciones hay una pérdida de control. Una posible diferencia es que entre las drogas con una dosis se controla el síndrome de abstinencia; en las adiciones psicológicas, por el contrario, el paciente -un jugador patológico o un adicto a las compras, por ejemplo- puede pasar horas, incluso días jugando o comprando sin que ello ponga fin a su abstinencia.

VULNERABILIDAD PSICOLÓGICA A LAS ADICCIONES

El ser humano necesita alcanzar un nivel de satisfacción global en su vida. Normalmente, éste se obtiene repartido en diversas actividades: la familia, el trabajo, el sexo, la comida, las aficiones, el deporte, etc. Según señala Bertrand Russell en la conquista de la felicidad, el mayor número de aficiones e intereses de una persona está en relación directa con una mayor probabilidad de ser feliz. Las carencias en una dimensión puede compensarse, en cierto modo, con las satisfacciones obtenidas en otra.

Por el contrario, si una persona es incapaz o se siente especialmente frustrada en una o varias de sus facetas, puede entonces centrar su atención en una sola. El riesgo de adicción en estas circunstancias es alto. De este modo, la adicción es una afición patológica que, al causar dependencia, restringe la libertad del ser humano (Alfonso Fernández, 1996).

En algunos casos hay ciertas características de personalidad o estados emocionales que aumentan la vulnerabilidad psicológica a las adicciones: la impulsividad; la disforia (estado anormal de ánimo que se vivencia subjetivamente como desagradable y que se caracteriza por oscilaciones frecuentes del humor); la intolerancia a los estímulos displacenteros, tanto físicos (dolores, insomnio, fatiga, etc.) como psíquicos (disgustos, preocupaciones, responsabilidades, etc.); y la búsqueda exagerada de sensaciones. Hay veces, sin embargo, en que en la adicción subyace un problema de personalidad -de baja autoestima, ejemplo- o un estilo de afrontamiento inadecuado ante las dificultades cotidianas.

FACTORES PSICOLÓGICOS DE PREDISPOSICIÓN

  • Estado de ánimo disfórico
  • Intolerancia a los estímulos displacenteros
  • Impulsividad
  • Búsqueda de sensaciones
  • Autoestima baja
En último término se trata de personas que carecen de un afecto consistente y que intentan llenar esa carencia con sustancias químicas (alcohol y otras drogas ) o sin sustancias (compras, juegos, ordenadores o trabajo). Porque el cariño llena de sentido nuestra vida y contribuye de forma decisiva a nuestro equilibrio psicológico.

En resumen, un sujeto con una personalidad vulnerable y una cohesión familiar débil corre un gran riesgo de hacerse adicto si cuenta con un hábito de recompensas inmediatas, tiene el objeto de la adicción a la mano, se siente presionado por el grupo y está sometido a circunstancias de estrés (fracaso escolar, frustraciones afectivas, competitividad, etc.) o de vacío existencial (inactividad, aislamiento social, falta de objetivos, etc.).

INICIO Y MANTENIMIENTO DE LAS ADICCIONES PSICOLÓGICAS

INICIO:

1. Vulnerabilidad psicológica

2. Actividades placenteras

3. Presión social

MANTENIMIENTO:

1. Déficits de autocontrol y del control de impulsos

2. Dependencia

3. Falta de actividades gratificantes

La adicción surge entre las actividades placenteras y la dependencia a ellas




En la siguiente entrega estaremos abordando la adicción al juego.









FAMILIA Y PREVENCIÓN INTEGRAL

Conceptos sobre familia

"Es el origen, la fuente, la encrucijada de todas las relaciones. Es el primer punto de encuentro de la vida biopsíquica, social y espiritual; es el nido esencial de la comunidad más íntimo y más estable que el hombre y la mujer puedan construir entre sí, dando origen al sistema de relaciones más necesario para el género humano y es la primera comunidad donde el valor personal y el valor social, irradian para vivificar a la humanidad".

Compartimos plenamente esta definición de Cistemas y Lamus, ya que integra todos los elementos y relaciones que se dan en la dinamia familiar.

Peña Vega nos ilustra con este concepto: "Es el conjunto de personas que viven habitualmente bajo el mismo techo, y por otra parte están ligadas entre ellas por lazos de parentesco, afinidad, de afecto o amistad". Es decir, aquí se destaca que lo importante en la familia, es la relación que se de en su convivencia.

Fernando Savater, en su obra El Valor de Educar, indica: "La educación familiar funciona por la vía del ejemplo, no por sermones discursivos de trabajo, y está apoyado por gestos, hábitos del corazón, chantajes afectivos junto a la recompensa de caricias y castigos distintos para cada cual, cortados a nuestra medida".

Gimeno Callado la define como "Una unidad de personas en interacción"; indicando finalmente que la familia se comporta como un sistema compuesto de individuos en relación duradera y sujetos a influencia de su entorno. La familia es algo más que la simple suma de sus miembros y sus características.

Con el objeto de resaltar la importancia de la participación de la familia en el procesos de orientación preventiva al consumo de Sustancias Psicoactivas, se señalan algunas características que debe reunir para contribuir efectiva y positivamente al proceso formativo en valores; lo que representa una fortaleza personal frente al consumo de sustancias.

Características

1. Buena relación de pareja: respeto, afecto, capacidad de escuchar y manera adecuada de abordar la resolución de conflictos.

2. Ausencia o bajo consumo de alcohol en los padres.

3. Ausencia de consumo de Sustancias Psicoactivas en los padres.

4. Presencia de ideas religiosas o espirituales en los padres.

5. La realización conjunta de actividades de padres e hijos, tales como paseos, juegos, visitas sociales, eventos escolares, compartir algunas comidas de forma regular. Estas actividades impiden el aislamiento de sus miembros.

6. Expresión abierta y cotidiana de cariño y afecto entre los diferentes miembros de la familia, mediante abrazos, caricias, palabras o gestos.

7. Reconocer, hablar y señalar en forma explícita y con regularidad de la creatividad, habilidades, capacidades y cualidades de cada uno de los integrantes de la familia, manteniendo una actitud de permanente asombro ante sus cambios y desarrollo.

8. Contar con reglas claras y coherentes que son producto de la concertación y del consenso; donde los roles están bien definidos y los límites entre generaciones posibilitan a su vez, la diferencia y la armonía.

9. Diálogo abierto, cariñoso, oportuno y muy atento sobre los diferentes temas que preocupan a cualquier miembro de la familia: "siempre cuenta conmigo, siempre puedo contar contigo".

10. La presencia de rituales que acercan o unen a la familia tanto en momentos de alegría que emanan de celebraciones conjuntas de cumpleaños, aniversarios, fiestas, triunfos; como en horas de tristeza ante la muerte, la tragedia, la derrota, etc. dado que ello le permite crear una red de apoyo, solidaridad y de sentido de pertenencia.

11. Contar con historias compartidas. El ser humano para afianzarse en su realidad, requiere las raíces que le ofrece el saber de dónde viene y qué le brindan los hechos en los cuales se reconoce como protagonista.

12. L desautorización de un padre a otro en presencia de los hijos, no se presenta o es rara. Las naturales discrepancias de los padres, son resueltas en ausencia de los menores o delante de ellos con una actitud de respeto y diálogo respetuoso; enmarcándolo dentro de la normalidad de las relaciones familiares; así, las discrepancias entre sus padres, los hijos las verán como las que todas las personas tenemos y que son normales.

13. Existe autonomía de los miembros de la familia, sin desconocer su estado de interdependencia y reciprocidad. Dentro del marco de respeto a la cultura y valores familiares, tanto los hijos como los padres pueden escoger con libertad sus creencias religiosas, manera de vestir, gustos, trabajo y profesión.

Se requiere trabajar en la educación y orientación familiar, como un elemento básico para la formación en valores, lo que sin lugar a dudas, disminuye la vulnerabilidad de los sujetos frente al consumo de Sustancias Psicoactivas.

Recordemos que sin familia no hay prevención.